Arrendar una propiedad es una de las decisiones más importantes tanto para el arrendador como para el arrendatario.
Sin embargo, muchos desconocen los aspectos clave que regula la Ley de Arriendo en Chile, lo que puede llevar a malentendidos y conflictos innecesarios. Conocer a fondo esta ley es crucial para garantizar un contrato justo y evitar sorpresas desagradables.
La legislación actual, actualizada con la Ley 21.461, introduce nuevas disposiciones que buscan proteger a ambas partes y modernizar el proceso de arriendo.
En este artículo, Homie te explica los puntos más importantes que debes considerar si estás involucrado en un contrato de arrendamiento y recuerda consultar cómo adaptar tu contrato a la ley vigente de arrendamiento.
Departamentos en arriendo en Chile
¿Qué regula la ley de arriendo en Chile?
La ley de arrendamiento en Chile tiene como objetivo establecer normas claras para los contratos de arrendamiento de bienes inmuebles urbanos.
Entre sus principales disposiciones se encuentra la regulación de los derechos y obligaciones tanto del arrendador como del arrendatario, así como la duración de los contratos, las actualizaciones de renta y las garantías asociadas.
Esta ley es fundamental para asegurar que ambas partes cumplan con sus responsabilidades y eviten abusos.
De igual manera, introduce mecanismos para acelerar procesos judiciales relacionados con el no pago del arriendo o la ocupación ilegal de la propiedad.
¿Cuánto debe durar un contrato de arriendo según la ley chilena?
La Ley de Arriendo no establece una duración mínima o máxima obligatoria para los contratos de arrendamiento en Chile.
Es común que los contratos tengan una duración de un año con posibilidad de renovación automática si ambas partes están de acuerdo. Si se desea finalizar el contrato, tanto el arrendador como el arrendatario deben notificarlo con antelación, usualmente con un mes de anticipación.
Es importante que el contrato detalle la duración del arrendamiento y las condiciones para su renovación o término, lo que ayuda a evitar confusiones y asegura que ambas partes estén al tanto de sus compromisos.
¿Cuáles son los derechos y obligaciones del arrendador y arrendatario?
La Ley de Arrendamiento en Chile define claramente los derechos y obligaciones de ambas partes.
Por un lado, el arrendador tiene el derecho de recibir el pago del arriendo en la fecha acordada y de exigir que la propiedad sea devuelta en las mismas condiciones en las que fue entregada, salvo el desgaste normal.
Por su parte, el arrendatario tiene derecho a usar la propiedad de manera pacífica, a ser informado de cualquier ajuste en el precio del arriendo con al menos 60 días de anticipación y a recibir la devolución de su garantía al finalizar el contrato.
Es importante mencionar que esta garantía no debe superar el equivalente a dos meses de arriendo y debe ser restituida dentro de los 60 días posteriores a la devolución del inmueble.
Te recordamos consultar cómo adaptar tu contrato a la ley vigente de arrendamiento
¿Cómo se ajusta la renta del arriendo?
Otro punto clave que regula la norma de arriendo es la actualización del precio del arriendo. La ley establece que cualquier modificación en la renta debe ser acordada entre ambas partes y, generalmente, se ajusta anualmente según la inflación o algún otro índice previamente acordado en el contrato.
Cualquier cambio en la renta debe ser notificado con suficiente antelación, y el arrendatario tiene el derecho de aceptar o rechazar estos ajustes.
En caso de que el arrendatario no acepte el nuevo precio, el contrato puede ser terminado conforme a lo que estipule el acuerdo inicial, sin perjuicio de las disposiciones sobre notificación y tiempos de salida.
Beneficios de cumplir con la ley de arriendo
Respetar la regulación de arrendamiento no solo evita problemas legales, sino que también garantiza la seguridad y la transparencia en las relaciones entre arrendador y arrendatario.
Algunos de los beneficios más relevantes incluyen:
- Protección legal: Si alguna de las partes incumple con sus obligaciones, la ley ofrece mecanismos rápidos y claros para resolver disputas, evitando que los conflictos se prolonguen por años.
- Evitar cláusulas abusivas: Conocer la ley previene que se incluyan cláusulas que favorezcan desproporcionadamente a una de las partes, lo que puede ser considerado como una cláusula abusiva y declarada nula.
- Seguridad en los pagos: La nueva legislación facilita los procedimientos de cobro de arriendos y desalojos por no pago, lo que da mayor seguridad a los arrendadores y alienta la formalización del sector.
Propiedades en arriendo en Santiago
Cambios introducidos por la Ley 21.461
La actualización de la ley con la promulgación de la Ley 21.461 introduce varios cambios importantes para los contratos de arrendamiento en Chile.
Entre las modificaciones más notables se encuentran:
- Medidas precautorias de restitución anticipada: Esto permite que los arrendadores inicien procesos judiciales más rápidos en caso de no pago, lo que facilita la recuperación del inmueble en menos tiempo.
- Prohibición del subarriendo sin consentimiento: El arrendatario no puede subarrendar la propiedad a menos que esto esté expresamente permitido en el contrato.
- Garantías máximas: La ley limita las garantías a un máximo de dos meses de arriendo, evitando que los arrendadores exijan montos desproporcionados como garantía.
La importancia de conocer la ley de arriendo
Conocer las disposiciones de la ley de arrendamiento en Chile es esencial para tener un contrato justo y seguro. Tanto arrendadores como arrendatarios deben estar al tanto de sus derechos y obligaciones para evitar conflictos y asegurar una relación transparente.
Cumplir con la normativa vigente no solo evita problemas legales, sino que también garantiza una experiencia de arriendo satisfactoria para ambas partes.